Por: Beatriz Llorens López, asociada del Círculo
Filatélico del Cerro
Quienes visitan la ciudad de La Habana, provengan del interior del
país o de lejanos confines amigos, no deben desaprovechar la oportunidad de
visitar dos museos de gran trascendencia por las piezas que contienen. Uno se
encuentra en el centro de la ciudad y el otro en la periferia, dedicándose
ambos a personajes históricos de épocas y lugares diferentes pero que continúan
llamando la atención de multitudes.
El primero se encuentra en la calle San Miguel # 1159, Municipio de
Centro Habana, en una espléndida edificación antigua que atesora, tal vez, una
de las mejores colecciones dedicada a Napoleón Bonaparte en las Américas
Para que los coleccionistas tuvieran la oportunidad de tener parte de
dicho museo en su propia casa, el correo cubano ha hecho cuatro emisiones que
reflejan cuadros y objetos de arte existentes en dicho centro de exposiciones,
en los años 1969, 1981, 1999 y 2001.
Por su parte, si el visitante va a la localidad de San Francisco de
Paula, podrá encontrar la llamada Finca Vigía, lugar donde residiera durante
los últimos años de su vida el afamado escritor estadounidense Ernest Hemingwayy allí, como si el tiempo se hubiera detenido, encontrar sus libros, su máquina
de escribir y todas las propiedades que lo hicieron un hombre popular para los
cubanos, incluyendo los trofeos de los animales que cazara durante sus diversas
aventuras africanas.
El correo cubano hizo una emisión de tres valores postales para correo
ordinario en 1963 con el fin de rendir homenaje a ese buen amigo de Cuba. Los
sellos muestran imágenes muy particulares de sus obras El
Viejo y el Mar y Por quién doblan las campanas, así como
del propio museo, mientras que en 1999 se emitió otro sello con imagen de
"El Viejo y el Mar" y la cara y firma del ilustre escritor, esta vez
por el centenario de su nacimiento.
Diversas postales y otros materiales filatélicos completan las
emisiones anteriores.
Aquí les esperan muchas piezas que le permitirán
conocer mejor al gran corso y también a ese polifacético hombre que hiciera
diversos safaris africanos, que persiguiera alemanes en Cuba durante la segunda
guerra mundial y que nos legara verdaderas joyas de la literatura.
Si
físicamente no puede hacer esas visitas, al menos trate de obtener los
materiales postales y filatélicos que los reflejan para que pueda atesorar en
su propia casa parte de lo que tenemos para ofrecerle por acá.
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