Por: Juan Hernández Machado,
Premio Nacional de Filatelia 2012 y
Presidente del Círculo Filatélico Cerro
La historia de cada país está llena de héroes que
la marcan para las futuras generaciones. Tal es el caso de Cuba con AntonioMaceo y Grajales, una de las figuras emblemáticas más recogidas por la
filatelia de la Mayor
de las Antillas.Antonio Maceo Grajales fue hijo del mulato
venezolano Marcos Maceo y de la morena liberta cubana Mariana Grajales y nació
el 14 de junio de 1845 en una zona rural de Santiago de Cuba.
De sus padres aprendería un inflexible código de
honor, una férrea disciplina, la destreza en el manejo de las armas y
habilidades en la administración de propiedades. Esto le permitió unirse a su
padre y a varios hermanos en el alzamiento del 10 de octubre de 1868, primera
clarinada por la independencia de Cuba.
Se destacó como soldado en el Ejército Libertador y
a pesar de las tendencias racistas y clasistas de varios de los patriotas de la
época, su valentía, inteligencia y tenacidad le
permitieron llegar al grado de Mayor General, siendo su Jefe y Maestro el gran
estratega dominicano Máximo Gómez Báez.
De Gómez, quien llegaría a General en Jefe del
Ejército Libertador cubano, aprendió el uso del machete como arma de guerra,
ante la escasez de las armas de fuego y municiones por parte de los mambises
cubanos y lo haría famoso en sus cargas
de caballería.
Antonio Maceo fue un acérrimo enemigo de las
sediciones militares que minaban la unidad de las tropas independentistas, así
como de las divisiones, regionalismo e indisciplina dentro de las filas
mambisas que luchaban por la independencia cubana de España.
Su
espíritu verdaderamente rebelde y patriótico se expresó en el rechazo a la Paz del Zanjón, con la cual se
puso fin a la primera etapa de la lucha por la independencia cubana llamada
Guerra de los Diez Años.
El
15 de marzo de 1878, junto a otros patriotas que pensaban igual que él, se
reunió con el Mariscal español Arsenio
Martínez Campos, en el lugar conocido como Mangos de Baraguá, hoy provincia de
Holguín.
En
esa reunión no reconoció la Paz
del Zanjón porque la misma no garantizaba ni la abolición de la esclavitud ni
la independencia para Cuba sino simplemente la amnistía para quienes habían
luchado y la manumisión para los negros que pelearon en el Ejército Libertador.
Su
viril actitud quedó recogida en la historia como La
Protesta de Baraguá y representa un
símbolo para los cubanos de hoy ante cualquier intento por socavar la libertad
e independencia del archipiélago.
Fue
precursor de otra etapa en las guerras por la independencia cubana al
organizar, junto a otros patriotas cubanos, la conocida como Guerra
Chiquita, la cual se iniciara en 1879 y también fracasara al no estar
debidamente creadas las condiciones para garantizar su éxito.
Estuvo
por corto tiempo en Haití y en Jamaica y finalmente se asentó en Costa Rica, a
donde lo fue a buscar el Apóstol de la libertad cubana, José Martí, para
iniciar la nueva etapa de la guerra, que él denominara la Guerra Necesaria y que comenzara el 24 de febrero de 1895.
Ese
año, junto a otros patriotas cubanos, desembarcó en las inmediaciones de
Baracoa, extremo oriental de Cuba y se interna en las montañas de la región. Se
entrevista con Gómez y Martí en la finca La Mejorana para coordinar las
acciones a seguir.
En
1896 parte de Mangos de Baraguá, al igual que hiciera Máximo Gómez, al frente de una columna para llevar la
guerra al occidente del país, llegando a la zona de Mantua, en Pinar del Río a
finales de ese año, luego de enfrentarse y derrotar a fuerzas españolas muy
superiores en número y armamento.
El
7 de diciembre de ese año es sorprendido por una fuerte columna española y cae
en combate junto a su ayudante, Francisco Gómez Toro, el hijo de Máximo Gómez.
Los restos mortales de ambos patriotas descansan en el monumento erigido a su
memoria en el Cacahual, lugar muy cercano a donde cayeran. Este es un lugar de
peregrinación de los cubanos.
Por
su entereza y actitud ante la vida en el afán de lograr la independencia de
Cuba, Maceo es llamado El Titán de
Bronce. Los sellos y materiales postales cubanos han
recogido diversos aspectos de la vida de este insigne patriota cubano. Y como
son tan diversos, no pretendemos agobiarlo haciendo un listado de todos los que
existen, sino simplemente mencionar algunos que reflejan momentos
trascendentales de su historia. Aparece por primera vez en un sello en 1907 para
correo ordinario por valor de 50
centavos, gris y negro.
Relacionados con la Protesta de Baraguá hay un sello de 3 centavos,
color sepia, de la emisión de 1933 por el 35 aniversario de la guerra de
independencia, que muestra el lugar donde se realizó dicho acto viril.
Por el centenario de su nacimiento, que fuera en
1945, en el año 1948, se hizo una
emisión de ocho valores postales para correo ordinario.
La Conferencia de La
Mejorana, que sostuviera con Martí y Gómez, aparece en el
valor de 8 centavos, aéreo, emitido en 1948 por aniversario 50 del inicio de
las guerras de independencia y en el valor de 85 centavos de la emisión de 1995
por el centenario de la muerte en combate de José Martí.
La identificación del pensamiento de Maceo con la
realidad cubana actual se expresa con la
emisión de 1991 para saludar el IV Congreso del Partido Comunista
cubano. En el valor de 5 centavos
está la estatua ecuestre de Maceo en la ciudad de Santiago de Cuba, sede del Congreso, y la inscripción “Un
eterno Baraguá”.
Algunas de sus famosas batallas y cargas al machete
también han sido recogidas por la filatelia cubana. Destacan las de Mal Tiempo
y la de Coliseo, que aparecen en los valores de 5 y 10 centavos de la emisión
de 1933 por el 35 aniversario de la guerra de independencia.
Su muerte y el mausoleo a su memoria también han
quedado recogidos en diferentes emisiones postales. En el valor de 5 centavos
de la emisión de 1948 por el centenario de su nacimiento aparece el mausoleo y
en el valor de un peso, su muerte.
El Mausoleo aparece también en el valor de 75
centavos de la emisión de 1996 por el centenario de su muerte en combate,
mientras que el valor de 65 centavos de esa emisión muestra el cuadro con
detalles de su muerte, por A. Menocal.
También aparece en el valor de un peso y 5 centavos
que se emitió en el 2006 en ocasión del 110 aniversario de su muerte.
Entre los años 70-80 del siglo pasado, Cuba emitió
un número diverso de tarjetas enteros postales para el Día de las Madres, cuyo sello
impreso recoge a Antonio Maceo y a su mamá, Mariana Grajales, indistintamente.
Tenemos
que agradecer a las autoridades postales cubanas el permitirnos conservar en
pequeño formato el legado de ese gran hombre que fuera Antonio Maceo Grajales.
Ese
mismo que convencido de que Cuba alcanzaría su independencia de España y ante
la injerencia de los Estados Unidos en los asuntos cubanos, escribiera a un
amigo: "El que intente apoderarse
de Cuba, recogerá el polvo de su suelo anegado en sangre, si no perece en la
lucha".
A
usted lo invitamos a indagar cuáles son todos los materiales filatélicos donde
podemos encontrar a esta insigne figura y, ¿por qué no? interesarse por la
filatelia, no se arrepentirá.
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