martes, 20 de junio de 2017

Primeros sellos de Mauricio



Por: Dayron Giro Monzón, juvenil del Círculo Filatélico del Cerro.

La República Soberana de Mauricio es un país soberano insular ubicado en el suroeste del océano Índico, a 900 kilómetros de las costas orientales de Madagascar y aproximadamente 3943 kilómetros al suroeste de la India. Su capital y localidad más poblada es Port Louis.
Además de la isla de Mauricio, la república incluye las islas de San Brandón, Rodrigues y las islas Agalega. Mauricio forma parte de las islas Mascareñas, juntamente con la isla francesa de La Reunión a 200 kilómetros al suroeste.

Existen varias versiones sobre el hallazgo de esta isla, pero la más predominante es la que nos cuenta que en 1598 una escuadra holandesa desembarcó en Grand Port y nombró la isla Mauricio, en honor del príncipe Mauricio de Nassau, estatúder de la República Holandesa.
Más tarde la isla se convirtió en una colonia francesa y pasó a llamarse Île de France. El 3 de diciembre de 1810 los franceses tuvieron que cederla, tras la derrota de Napoleón. Bajo el dominio británico el nombre de la isla volvió a Mauricio. La independencia fue conseguida en 1968.
Volviendo al tema, aquí  vamos a tratar las primeras emisiones postales de este país, época que coincide con el periodo histórico en que el mismo fue una colonia inglesa, demostrando que quizás sea este uno de los motivos que agudizaron el auge de este importante desarrollo postal en esta isla. Pero para hacerlo un poco más interesante invertiremos el orden cronológico del período comprendido entre 1862 y 1847, comenzando a conocer estas emisiones de sellos desde la última hasta la primera, de esta forma y sin quitarle importancia a las demás iremos aumentando el nivel de rareza de las piezas paulatinamente hasta dar con una de las estampillas más raras y más cotizadas a nivel global. Comencemos…

  Los primeros sellos que nos encontramos son el conocidos por el nombre de “Britannia”, producto a la imagen que poseía, correspondiente a la corona inglesa, la serie contaba con dos valores, uno de 1sh y otro de 6 P; este diseño perduró durante tres años de emisiones consecutivas, o sea desde 1859 hasta 1862, emitiéndose en 1859, 1861 y 1862, sola cambiando el color de las estampillas, los cuales oscilaron entre el azul, el verde, verde grisáceo y bermellón.

Antecediéndoles a los anteriores, específicamente en diciembre de 1859 es puesta en circulación esta serie impresa sobre papel amarillento; la que contaba con los valores de uno y dos peniques en bermellón y azul pálido respectivamente con variaciones de colores en rojo, rojo vino, azul y azul oscuro.
Según el catalogo Scott 2009 ya los sellos en este punto se están tornando bastante caros
Teniendo el que vemos en pantalla un valor que va desde los 3500 hasta los 9500 dólares

  Todavía en 1859 pero un mes antes (en octubre), nos topamos con otra emisión, pero solo se conoce de las estampillas correspondientes al valor de dos pence. Las cuales fueron impresas a partir de las planchas de 1848, un año interesante dentro del correo mauriciano, estos sellos eran generalmente conocidos como los  “Fillet Head”. Las planchas de 1 penny también fueron regrabadas para elaborar los sellos pero nunca fueron puestos en circulación.
Esta pieza, según catálogos, alcanza un valor de 150 000 dólares sin usar y 5500 usada, lo que supone una comparación bastante desbalanceada pero si tenemos en cuenta que resulta muy rara en su estado original producto a que este país no emitía la cantidad de sellos necesarios para satisfacer la demanda de su población, nos damos cuenta hacia que lado se debe inclinar la balanza.

Con la imagen de la reina Victoria y puesta en circulación en marzo de 1859 en color azul grisáceo, las estampillas tuvieron una reimpresión ese mismo año en azul intenso. Fueron parte de una emisión local de Port Louis, las reimpresiones fueron lúcidas y con un evidente fondo de líneas. En el medio de la impresión estas son un poco borrosas y producto al desgaste de las planchas algunas se tornan discontinuas. El valor de estos sellos se determina por la nitidez o el desgaste que tengan estas líneas, precios que se encuentran en el rango de 3250, 5500, 8000 y 10000 dólares.
 

  Esta es la segunda vez, aunque cronológicamente la primera vez que llegan a nuestra lista sellos con la imagen representativa de la “Metrópolis Inglesa” (Britania).
Circularon desde 1849 hasta 1858 y con reimpresión para principios de 1859 y aunque no se sepa mucho de ellos: los primeros en color carmelita rojizo y azul y los emitidos en el 1858 en azul, nunca fueron usados, y el correo de las islas Mauricio en vez de deshacerse de ellos los conservó, por lo que existen bastantes ejemplares y su nivel de rareza merma consecuentemente con su precio. Aunque otros pueden llegar a alcanzar los 775 dólares.
Ya casi llegando a lo más interesante se encuentran los sellos emitidos por el correo para 1848, cuyo objetivo era erradicar el error de su primera emisión, de la cual hablaremos.

LOS POST OFFICE DE MAURICIO

Las islas Mauricio, en 1847, constituyó la primera colonia inglesa y el quinto país del mundo que emitió oficialmente sellos postales. Fueron confeccionados por el grabador José Barnard, quien no tenía experien­cia profesional en esta actividad, lo que trajo consigo algunas imprecisiones en su fabricación. En las estam­pillas aparece la efigie de la reina Victoria, de Inglaterra, aunque en su diseño el artista no tuvo mucho éxito al reproducir su imagen. La emisión tenía 2 valores: un penique rojo y dos peniques en color azul, que fueron impresos en una misma plancha de cobre.
Estos sellos llevan entre sus leyendas la de POST OFFICE (oficina de correos), cuando en realidad debía decir “POST PAID” (porte pagado). Sobre este error existe la versión de que Barnard, al grabar los sellos, no recordaba la leyenda correcta y al dirigirse a la Ofici­na de Correos para buscar información y los datos que debía grabar, leyó en la fachada del correo el anuncio de POST OFFICE. Se supone que, sin hacer ninguna otra consulta, incluyó este texto errado en el diseño del sello. Cuando este cambio fue detectado, se de­terminó que los sellos no se volvieran a imprimir; solo quedaron estampados 1 000 ejemplares (500 de un penique y 500 de dos peniques).
Los sellos fueron puestos a la venta entre el 20 y el 21 de septiembre de 1847, y su aceptación fue tan grande que a los pocos días se habían vendido en su totalidad. La mayoría de estos sellos se utilizaron para cursar las invitaciones a un gran baile que organizó por aquellos días la esposa del Gobernador de la Isla. So­lamente han llegado a nuestros días la exigua cantidad de 26 sellos (14 de un penique y 12 de dos peniques), algunos de los cuales se conservan en su sobre ori­ginal y son considerados joyas de la filatelia mundial.
Conclusiones
A manera de conclusión quiero realizarles una pregunta: ¿habría sido tan amplio el desarrollo postal en este país si no hubiese sido una colonia británica?
Respuesta: por supuesto que no. Los británicos se caracterizaron por dar un buen desarrollo postal a sus colonias, a diferencia de otras Metrópolis, pero eso es tema de otro encuentro. Ahora, podemos  afirmar que mediante este trabajo   hemos podido conocer más de las primeras emisiones de sellos postales de las Islas Mauricio, contribuyendo  así, con el trabajo de  nosotros los filatelistas, que se conozca un poco más de esta arista africana, el desarrollo postal, que por acá no es muy conocida. MUCHAS GRACIAS…

Nota del editor: Este trabajo resultó ser el primer premio compartido en el Coloquio sobre Historia Postal africana, celebrado en la Casa de África el viernes 19 de mayo del 2017, como parte de la Exposición Regional CERFILEX 2017

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